La memoria ECC, también conocida como memoria de código de corrección de errores, tiene la capacidad de detectar y corregir errores en los datos. Se utiliza comúnmente en computadoras de escritorio, servidores y estaciones de trabajo de alta gama para mejorar la estabilidad y seguridad del sistema.
La memoria es un dispositivo electrónico y pueden producirse errores durante su funcionamiento. Para los usuarios con altos requisitos de estabilidad, los errores de memoria pueden provocar problemas críticos. Los errores de memoria se pueden clasificar en dos tipos: errores graves y errores leves. Los errores graves son causados por daños o defectos del hardware y los datos son consistentemente incorrectos. Estos errores no se pueden corregir. Por otro lado, los errores leves ocurren aleatoriamente debido a factores como interferencias electrónicas cerca de la memoria y pueden corregirse.
Para detectar y corregir errores de memoria blanda, se introdujo el concepto de “verificación de paridad” de memoria. La unidad más pequeña en la memoria es un bit, representado por 1 o 0. Ocho bits consecutivos forman un byte. La memoria sin verificación de paridad tiene solo 8 bits por byte y, si algún bit almacena un valor incorrecto, puede generar datos erróneos y fallas en la aplicación. La verificación de paridad agrega un bit adicional a cada byte como bit de verificación de errores. Después de almacenar datos en un byte, los ocho bits tienen un patrón fijo. Por ejemplo, si los bits almacenan datos como 1, 1, 1, 0, 0, 1, 0, 1, la suma de estos bits es impar (1+1+1+0+0+1+0+1=5 ). Para paridad par, el bit de paridad se define como 1; de lo contrario, es 0. Cuando la CPU lee los datos almacenados, suma los primeros 8 bits y compara el resultado con el bit de paridad. Este proceso puede detectar errores de memoria, pero la verificación de paridad no puede corregirlos. Además, la verificación de paridad no puede detectar errores de doble bit, aunque la probabilidad de que se produzcan errores de doble bit es baja.
La memoria ECC (comprobación y corrección de errores), por otro lado, almacena un código cifrado junto con los bits de datos. Cuando los datos se escriben en la memoria, se guarda el código ECC correspondiente. Al volver a leer los datos almacenados, el código ECC guardado se compara con el código ECC recién generado. Si no coinciden, los códigos se decodifican para identificar el bit incorrecto en los datos. Luego se descarta el bit erróneo y el controlador de memoria libera los datos correctos. Los datos corregidos rara vez se vuelven a escribir en la memoria. Si se vuelven a leer los mismos datos erróneos, se repite el proceso de corrección. Reescribir datos puede generar una sobrecarga, lo que lleva a una disminución notable del rendimiento. Sin embargo, la memoria ECC es crucial para servidores y aplicaciones similares, ya que proporciona capacidades de corrección de errores. La memoria ECC es más cara que la memoria normal debido a sus funciones adicionales.
El uso de la memoria ECC puede tener un impacto significativo en el rendimiento del sistema. Si bien puede reducir el rendimiento general, la corrección de errores es esencial para aplicaciones y servidores críticos. Como resultado, la memoria ECC es una opción común en entornos donde la integridad de los datos y la estabilidad del sistema son primordiales.
Hora de publicación: 19-jul-2023