La conexión en caliente, también conocida como Hot Swap, es una función que permite a los usuarios quitar y reemplazar componentes de hardware dañados, como discos duros, fuentes de alimentación o tarjetas de expansión, sin apagar el sistema ni cortar la energía. Esta capacidad mejora la capacidad del sistema para la recuperación oportuna de desastres, la escalabilidad y la flexibilidad. Por ejemplo, los sistemas avanzados de duplicación de discos diseñados para aplicaciones de alta gama suelen ofrecer funcionalidad de conexión en caliente.
En términos académicos, la conexión en caliente abarca el reemplazo en caliente, la expansión en caliente y la actualización en caliente. Inicialmente se introdujo en el dominio del servidor para mejorar la usabilidad del servidor. En nuestras computadoras cotidianas, las interfaces USB son ejemplos comunes de conexión en caliente. Sin conexión en caliente, incluso si un disco está dañado y se evita la pérdida de datos, los usuarios aún necesitan apagar temporalmente el sistema para reemplazar el disco. Por el contrario, con la tecnología de conexión en caliente, los usuarios pueden simplemente abrir el interruptor de conexión o la manija para retirar el disco mientras el sistema continúa funcionando ininterrumpidamente.
La implementación de la conexión en caliente requiere soporte en varios aspectos, incluidas las características eléctricas del bus, el BIOS de la placa base, el sistema operativo y los controladores de dispositivos. Garantizar que el entorno cumpla con requisitos específicos permite la realización de conexiones en caliente. Los buses del sistema actual soportan parcialmente la tecnología de conexión en caliente, especialmente desde la era 586 cuando se introdujo la expansión de buses externos. A partir de 1997, las nuevas versiones de BIOS comenzaron a admitir capacidades plug-and-play, aunque este soporte no abarcaba la conexión en caliente completa, sino que solo cubría la adición y el reemplazo en caliente. Sin embargo, esta tecnología es la más utilizada en escenarios de conexión en caliente, superando así el problema del BIOS de la placa base.
En cuanto al sistema operativo, la compatibilidad con plug-and-play se introdujo con Windows 95. Sin embargo, la compatibilidad con la conexión en caliente estuvo limitada hasta Windows NT 4.0. Microsoft reconoció la importancia de la conexión en caliente en el dominio del servidor y, en consecuencia, se agregó soporte completo de conexión en caliente al sistema operativo. Esta característica continuó en versiones posteriores de Windows basadas en la tecnología NT, incluido Windows 2000/XP. Siempre que se utilice una versión del sistema operativo superior a NT 4.0, se proporciona soporte integral de conexión en caliente. En términos de controladores, la funcionalidad de conexión en caliente se ha integrado en los controladores para Windows NT, NetWare de Novell y SCO UNIX. Al seleccionar controladores compatibles con estos sistemas operativos, se cumple el elemento final para lograr la capacidad de conexión en caliente.
En las computadoras normales, los dispositivos conectados a través de interfaces USB (Universal Serial Bus) e interfaces IEEE 1394 pueden lograr una conexión en caliente. En los servidores, los componentes que se pueden conectar en caliente incluyen principalmente discos duros, CPU, memoria, fuentes de alimentación, ventiladores, adaptadores PCI y tarjetas de red. Al comprar servidores, es fundamental prestar atención a qué componentes admiten la conexión en caliente, ya que esto afectará significativamente las operaciones futuras.
Hora de publicación: 21-jul-2023